Hoy (2 de agosto de 2021), el obispo McElroy publicó una carta a los fieles explicando cómo la diócesis implementaría la decisión del Papa Francisco de limitar la celebración de la Misa Latina Tridentina en las iglesias parroquiales y exigir el permiso previo del obispo diocesano si un sacerdote desea utilizar la Misa Latina anterior al Vaticano II (ver más abajo).
Las misas en latín se han celebrado en Santa Ana, en la parte sur y central del condado, y en Santa María y Santa Margarita, en la parte norte.
Las misas en Santa Ana, parroquia personal de la diócesis confiada a los sacerdotes de la Fraternidad de San Pedro, continuarán sin cambios con el permiso del obispo McElroy.
Las misas en St. Mary's y St. Margaret's, ambas parroquias territoriales, se suspenderán por ahora y se está trabajando, en colaboración con los fieles que asisten a esas misas, para encontrar un lugar no parroquial en el norte del condado que pueda satisfacer sus necesidades. Se anunciará una nueva ubicación tan pronto como se puedan hacer los arreglos necesarios.
Para más información, lea la carta del obispo McElroy.