SAN DIEGO, CA (17 de julio de 2020) - La parroquia católica de Descanso permanecerá cerrada hasta finales de julio después de que una mujer que trabajaba como voluntaria allí dijera que había dado positivo por Covid-19.
El voluntario ayudó a preparar el altar para las misas diarias y de fin de semana en la parroquia de Nuestra Señora de la Luz. Alrededor de 10 personas asisten a las misas entre semana, y entre 20 y 30 los fines de semana.
El voluntario llevaba una máscara y mantenía la distancia social, como se exige a todos los que asisten a misa.
El pasado miércoles 15 de julio por la mañana, llamó por teléfono a la oficina parroquial para comunicar que había dado positivo en la prueba de Covid-19. El párroco, el padre Enrique Fuentes, se puso inmediatamente en contacto con todos los feligreses que pudieran haber estado en contacto con la voluntaria, en particular con sus compañeros de servicio y sacristanes, y les sugirió que se autodiagnosticaran y se hicieran las pruebas. Y cerró inmediatamente la parroquia hasta finales de mes para realizar una limpieza a fondo.
El padre Fuentes, que no presenta ningún síntoma, se ha sometido hoy a pruebas y está a la espera de los resultados.